El presidente de la República, Horacio Cartes, remitió ayer al titular de la Cámara de Senadores, Fernando Lugo, una nota a través de la cual pide acelerar, tratamiento de urgencia mediante, el estudio del proyecto de ley de rehabilitación financiera, que presentó el 9 de agosto pasado, con la intención de ayudar a los pequeños productores campesinos afectados por las desfavorables condiciones climáticas de los últimos meses.
El senador oficialista Juan Darío Monges y el ministro de Agricultura y Ganadería, Juan Carlos Baruja, entregaron la nota al titular del Congreso. El Ejecutivo apeló a este recurso constitucional –contemplado en el Art. 210 de la Carta Magna– en razón de la urgencia que impone la búsqueda de soluciones para la situación de necesidad por la que atraviesan miles de familias campesinas de nuestro país.
"Es importante destacar que se apela a este recurso constitucional establecido para el Poder Ejecutivo en razón de la urgencia que nos impone la búsqueda de soluciones para la situación de necesidad por la que atraviesan miles de familias campesinas de nuestro país, que por diversos motivos se encuentran desamparadas ante los estragos causados por la inclemencia del tiempo, la caída de los precios del mercado de varios rubros de la agricultura familiar y las altas tasas de interés que en muchos casos se ven obligados a afrontar", argumenta la misiva.
Baruja sostuvo, a su vez, que "también solicitamos la ampliación del presupuesto de Agricultura y Ganadería, la capitalización del Crédito Agrícola de Habilitación (CAH) de manera de poder dar respuesta a la problemática campesina. No porque los campesinos se retiraron de la plaza el Gobierno está en reposo. Al contrario, estamos trabajando intensamente para poder dar respuesta a los campesinos".
El proyecto de ley busca el fortalecimiento financiero de los campesinos y plantea además asistencia alimentaria, preparación de terreno y distribución de semillas para los productores que hayan sido afectados por las heladas.
También contempla la posibilidad de que los labriegos puedan recibir subsidios en semillas, insumos, fertilizantes, nuevos créditos sin tener en cuenta la situación de deudas, sino la capacidad productiva, así como asistencia técnica para la producción y la comercialización.