Brasilia, Brasil. AFP.
El gobierno brasileño expresó su "repudio" por las críticas "tendenciosas" emitidas por órganos de defensa de los derechos humanos de la ONU y la OEA, tras recientes intervenciones policiales para reprimir protestas.
"El gobierno brasileño repudia, de la manera más categórica, el tenor desinformado y tendencioso del comunicado conjunto emitido el viernes por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH) y de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH)", indicó un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores. "Causa estupor la ligereza con que el ACNUDH y la CIDH pretenden inducir fantasiosamente a creer que Brasil carece de instituciones sólidas, dedicadas a la protección de los derechos humanos y basadas en el estado democrático de derecho", prosigue el palacio de Itamaraty.
El ACNUDH y la CIDH condenaron el viernes "el uso excesivo de la fuerza por parte de la Policía Militar para reprimir protestas y manifestaciones en Brasil", así como "la violencia policial en operativos de seguridad en el espacio urbano y en el marco del conflicto de tierras". Los dos organismos "urgen" al Estado a "garantizar el estricto apego a los principios de legalidad, proporcionalidad y absoluta necesidad en el uso de la fuerza en protesta social".
Decenas de miles de personas convocadas por los sindicatos y partidos de izquierda exigieron el miércoles en Brasilia la salida del presidente Michel Temer y el retiro de sus medidas de austeridad. Grupos de jóvenes provocaron destrozos en varios ministerios, dando lugar a una virulenta respuesta policial que dejó una cuarentena de heridos, al menos uno de bala.
Temer ordenó el despliegue de tropas militares, pero el jueves las retiró ante la andanada de críticas que recibió.
Críticas "cínicas" y "de mala fe"
La Policía brasileña fue también criticada por una violenta intervención realizada el domingo para desmantelar "Cracolandia", el "barrio del crack" de San Pablo. En su respuesta, Itamaraty "lamenta que la acción sea capitalizada por la nota, cínicamente y fuera de contexto, con fines políticos inconfesables". El comunicado conjunto del ACNUDH y la CIDH se refirió, además, a una intervención policial que el miércoles dejó 10 muertos en una hacienda de Pará (nordeste), en el marco de un conflicto agrario, según la Comisión Pastoral de la Tierra (CPT). Se recibió "información sobre el uso recurrente de la violencia en el marco del conflicto agrario", apuntan los organismos. Itamaraty afirma que las acusaciones sobre el conflicto de Pará "son rayanas con la mala fe" y que el incidente "está siendo investigado por las autoridades".