El fabricante de armas ruso Kalashnikov Kontsern está experimentando una reestructuración corporativa. De acuerdo con declaraciones oficiales e informes de los medios de comunicación rusos, la empresa será vendida, lo cual la privatizará de manera efectiva y supuestamente dejará a un solo inversionista, Aleksei Krivoruchko, con la participación mayoritaria.
La venta es la transformación más reciente de la empresa, la cual ha fabricado rifles Kalashnikov, mejor conocidos como AK-47, durante 70 años.
Kalashnikov Kontsern, ubicada en una ciudad al este de Moscú, es la descendiente de una empresa propiedad del Estado que fabricó por primera vez los rifles AK-47 después de la Segunda Guerra Mundial.
La empresa aún suministra armas al Ejército ruso, pero también se adentró en nuevos negocios redituables, como la venta de rifles a civiles, la fabricación de lanchas de motor y drones, así como el cobro de regalías a las empresas de videojuegos que muestran su marca registrada.
De esta manera, Kalashnikov Kontsern representó una estrategia más fuerte en la industria de la defensa rusa bajo el mando del presidente Vladimir V. Putin.
Una sociedad controladora del Estado que se creó a inicios de la presidencia de Putin, Rostec, ha intentado mejorar la gobernanza corporativa en las fábricas de defensa. En el 2013, Rostec vendió poco menos del 50 por ciento de Kalashnikov, en una privatización parcial.
Esta venta dejó a Rostec con una participación mayoritaria de Kalashnikov, mientras que Krivoruchko mantuvo alrededor de un cuarto de la empresa, y otros dos inversionistas, Andrei Bokarev e Iskander Makhmudov, se quedaron con el resto.
Dos ventas –una anunciada el 10 de noviembre y otra el 13 de noviembre– reestructurarán la propiedad de la empresa y pondrán la participación mayoritaria en manos privadas.
El 13 de noviembre, Sergei V. Chemezov, director de la sociedad controladora, mencionó que Rostec recibió la aprobación del gobierno para vender una participación de 26 por ciento de Kalashnikov.
Rostec sugirió la idea de la privatización en febrero, pero no había recibido el apoyo del gobierno hasta ahora. Por el momento, Kalashnikov mencionó en un comunicado de prensa que un comprador sería Krivoruchko, un empresario industrial ruso.
"Acabamos de tomar la decisión de vender la participación de 26 por ciento menos una acción", señaló Chemezov, en comentarios presentados por Zvezda, un sitio ruso de noticias militares, aunque no especificó al comprador.
El 10 de noviembre, Bokarev y Makhmudov anunciaron que es posible que vendan sus participaciones a Krivoruchko, reportó el periódico Kommersant.
De manera conjunta, las dos ventas darán el control de Kalashnikov a Krivoruchko.